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Tuve la suerte de ir a la charla que se hizo sobre Dome, un proyecto llevado a cabo por Luís y Rómulo Royo en colaboración con Norma Editorial. Los allí asistentes nos enteramos de los pormenores de un proyecto singular que, para el próximo Salón del Cómic, saldrá recopilado en un libro.

El origen del proyecto, sin entrar en pormenores, es de lo más singular. Un ruso ricachón, que se está construyendo un palacete en un pueblo algo alejado de Moscú, decide que la cúpula de su nueva residencia tenga pinturas de Luís Royo de temática lésbica. Es como si yo le pidiera a Miyazaki que me hiciera una ilustración a la pared de mi comedor. La diferencia es que ese ruso tiene pasta y a mi sólo me queda un paquete de macarrones en la despensa. Sigamos. El señor ruso acaba convenciendo, en todos los aspectos, a Luís Royo y Norma para encarar un proyecto de esta envergadura con un mínimo de garantías. Luis contó con la ayuda de su hijo Rómulo, también pintor, con lo que todo quedaba en familia.

El trabajo se hizo en un tiempo record, tres meses. A tenor de las imágenes que se pudieron ver, el resultado final es realmente impresionante. El libro, de próxima aparición, intentará reflejar en sus páginas todas las aventuras y desventuras que supuso el trabajo y la estancia en un país tan diferente como Rusia. De todas formas, difícil será en comparación con las declaraciones que se pudieron oír de los artistas, donde demostraban que no todo fueron cosas buenas en esta singular travesía.

Dome en la web Norma Editorial